jueves, 25 de septiembre de 2014

Aquí no quedan dioses

Se aburrieron hace tiempo y decidieron desperdiciar su eterna existencia en otra cosa. Desde entonces cada uno se rasca con sus propias uñas y nos inventaron eso del libre albedrío para no sentirnos desvalido. Pero la triste verdad es que perdieron interés en una raza tan bruta y no existe pastilla tan fuerte para tremendo dolor de cabeza. A mí me la suda lo que hagan esos maricas, bien por ellos y sus celestiales culos.

Aquí no queda ningún dios o deidad o santo o buda o virgen (de esas dudo que existieran). Aquí solo quedan bolsas de piel rellenas con vida, abandonados en un pedazo de algo entre medio de todo. Algunos pensaran que cuando el gato no está, los ratones hacen fiesta. Pero la triste realidad es otra,  dejaron gatos a cargo de la carnicería. No puedo decir otra cosa de muchos representantes divinos, me da envidia el no poder hacer también lucrativa mi demencia.

Ellos se fueron y de cierta forma no los culpo, yo también en su lugar hubiese hecho lo mismo. La verdad es que lo vengo haciendo desde hace mucho, cada vez que tiro la cadena.

martes, 23 de septiembre de 2014

¿Qué es lo que tengo?

Aun me queda algo de esa rabia infantil, algo de la preocupación por la vejes y algo del miedo irreal a la muerte. En cambio me sobran las palabras y las erecciones matutinas. Por ahí tengo guardado algunos sueños, entre ideales y frases bonitas para escribir con los nudillos.

Me queda una vida cada vez más corta por delante, un pasado que cambia matices con el tiempo y el presente como una partícula de polvo. Me queda la incómoda verdad de las revoluciones y la insufrible verdad de sentir aprecio por algunos seres humanos. De la felicidad vestida de mujer no me queda nada, solo recuerdos que morirán junto con la existencia.

Nunca tuve dios, pero si tuve fe en desperdiciada en la humanidad. Aún queda ese capricho de ponerme en frente contra la realidad y la manía de demostrar que es flexible. No me queda nada de creencia en la sociedad, solo la sensación de engaño permanente. Nunca he tenido utopías, solo los pasos para alcanzarla algún día. 

lunes, 22 de septiembre de 2014

Violento

Con paz solo consigues dormir, para cambiar el mundo se necesita ser un animal violento. Violento como los árboles desafían el humo sobre nuestras cabezas. Violento como la lluvia que entristece el paisaje. Violento como la vida y su adicción a la muerte. El que quiera enseñar su corazón debe estar dispuesto a sangrar, de lo contrario solo va ser otra mueca que se confunde entre los bostezos.

La paz no alcanza ni para ser utopía, es un estupidez compararla con el silencio y la libertad, pues la paz solo se comparar con la muerte. Es la paz lo que nos hace apoyar la cabeza en la muralla y resignarnos. Nos hace vivir atrapado entre pantallas y amigos imaginarios. Nunca me cansaré de gritar “LIBERTAD A LOS PRESOS MENTALES”. Es eso, o condenarnos a la muerte natural y no al saber morir.

Violento como los peces que no saben del suelo. Violento como el universo y su desconocida eternidad. Violento como el azar y la existencia. Violento como el sol y el agua creando vida. 

viernes, 19 de septiembre de 2014

GG

Me gusta que los insectos sean más que los humanos, pero nunca me ha gustado mucho que los humanos se comportan como los insectos.

Maldita humanidad, malditas larvas, maldito sentido de preservar la especie. Alguien en estos momentos está saliendo de la concha de su madre, solo para seguir llenando pañales con mierda. Que ironía, la televisión llenara de mierda más cabezas.

Maldita humanidad, maldita sea que nadie sepa lo que significa. El baño no alcanza para todos, mejor el aborto que hacer fila para limpiarse el culo.

¿Amas al próximo como a ti mismo? Suicídate, dona órganos y deja de seguir llenando el planeta con mierda. Aprende a cagar como insecto y no vivir como uno.

miércoles, 17 de septiembre de 2014

Pasando revista

Desperté con el sol del mediodía en la cara, la espalda haciendo contacto con el suelo y el sabor a vomito en la boca. Si en un momento perdí la cabeza, un dolor agudo en la sien me recordaba donde la había dejado. La billetera  algo más ligera y por lo menos las llaves no decidieron separarse de mi lado. Mejor no pensar en el último recuerdo, dejaré esa tarea para la ducha fría. Parece imposible, pero por fin mi cuerpo pide agua, señal de toda tregua con la mente adolorida. No conozco el bulto en mis pies, ni conozco el culo que duerme a mi lado, el lugar me es familiar tanto como cagar café en grano. Aparte de dinero, no me falta nada. Echar un vistazo al culo para ver que si valió la pena y salir pensando en que fue una buena noche.

lunes, 15 de septiembre de 2014

Un mal día

Pisar caca de perro; por fin consigues asiento en el metro y a la estación siguiente sube un ejército de embarazadas; se te apaga el último fósforo y el calefón sigue sin ser prendido; te toca la abuelita que cuenta las monedas de 10 delante de ti en la fila del súper; no encontrar la llaves en la puerta de tu casa y estar que te cagas;  se te da vuelta la bebida del almuerzo; no queda pan en el negocio y te ofrecen pan de molde; tu mina te dice “tenemos que hablar”.

Un mal día, un puto mal día lo tienen todos. No hay solución para eso, solo queda apoyar la cabeza en algo suave y mandar el mundo a la mierda entre sorbos de cerveza.

domingo, 14 de septiembre de 2014

Salvajes, la densidad de la sangre.

Fue un 5 de marzo cuando me presentaron a mi madre, pero tuvieron que pasar años para poder entender que rol que juega esa persona y ese título que conlleva. En fin, un poco para explicar el contexto, me vi creciendo en el seno de una familia clase media con todo lo que eso significa.  Los valores cristianismo mezclado con la burguesía, el miedo a la miseria, deseo por lo que la televisión nos ofrecía y la única real herencia a la cual aspirar era la educación. En esto último era mi madre una sacerdotisa al respecto, una muy orgullosa profesora de básica.

Yo desde mi ni nacimiento fui un salvaje, pero ese salvajismo, era solo la voz que según Cristo no debíamos escuchar. Así que la ignoraba por miedo al infierno, de la misma forma ingenua me tiraba del ropero con un par de guantes gritando “VENGADOR A MI”. Pero el ser salvaje estaba ahí al asecho, como el cazador que es, esperando su momento de atacar y hacerse valer. Yo solo ignoraba e intentaba ser buen hijo, un buen hermano, un buen cristiano merecedor de la salvación eterna. Lo que nunca intente fue ser buen alumno y lo digo con orgullo. Las escuelas te enseñan de todo, menos ser feliz. Esta parte es curiosa, porque si bien mi rechazo al colegio era absoluto, nunca pude ver en mi primer periodo escolar, a mi madre la profesora como un némesis. Por el contrario, para mí solo era la mamá y era motivo mucho más que suficiente para amarla.

Claro que hacia rabiar a mi madre y qué niño no lo ha hecho. Hacia mis travesuras, tenía mis berrinches y por sobre todo mi odio a la tarea. El resto del tiempo vivía lejos del mundo y sus problemas, como un miembro de una familia bien constituida ante los ojos de dios. Así que no me hacía problemas de disfrutar mi vida como hijo, hermano o nieto. Los grandes se hacían cargo de todo y yo podía darme el lujo tener a Tom y Jerry como religión. Siempre confíe mucho en los adultos, así que era simple dedicarme a ser feliz y vivir como un mamón entre los brazos de mi madre. Pero por mucho que viviese bajo las polleras de mamá, algo me hacía sentir como el lobezno a la siga de las tetas de la loba.  Dos depredadores disimulando en el mundo de los humanos, aunque motivos distintos. Lo mío era solo instinto, mi madre en cambio era una figura pública y con mucho interés en el que dirán.  A mí también me importa el que dirán tanto como a ella, pero no para camuflar mi salvajismo, más bien para camuflar mi humanidad.

Confirmé el lado salvaje de mi madre en el comienzo de la pubertad y la bestia comenzó a mostrar los colmillos. Tuvimos que ser dos mantis dentro de un salón de clases, separados por 44 pares de ojos que eran presente de ese momento de nuestras vidas. Es extraño que mi madre crea que le tenga rencor, porque estudie en un colegio distinto al de ella y mi hermana, de todos modos odiaría cualquier colegio. En verdad le tengo revancha al tener que llevar una esquizofrénica de vida de hijo y alumno. Era mucho si le sumo a la idea que era un perdedor, me vi obligado a refugiarme al 100% en la locura. ¿Un loco fingiendo más demencia aun? Claro que tuvo que ser opción cuando tienes intereses de adultos, pero con la experiencia de un niño mimado.

No vi como un salvaje hasta que use por última vez uniforme de colegio y lo acepte con los brazos abiertos. Cometí más errores que cualquiera y algunos me trajeron consecuencias que han hecho pasar más de un mal rato a mis seres amados (por lo cual es lo único que me hace sentir arrepentimiento). Pero he tenido momentos felices y he aprendido a ser consciente de eso. También de los momentos amargos y los difíciles que entretienen la vida. Salvaje endémico del cemento, puedo tener paz con solo apoyar la cabeza en el suelo y mirar los cables de la plaza. Salvaje como la maleza desobediente entre las veredas, me voy haciendo camino entre las calles y los domesticados. Más allá de un bien y un mal, mucho más simple que el cristianismo, mucho más profundo que el capital.

 Salvaje por herencia, esto no fue por aprendizaje. Me presentaron una mujer salvaje el 5 de marzo de 1982, yo simplemente aprendía amarla y a llamarla mamá. Pero definitivamente ella en su vientre formo a esta bestia, el ser que se niega usar corbata. Ella no está domesticada, la gente confunde a los lobos con perros. Solo es una sobreviviente de una generación de utópicos aplastados, se tuvo que hacer la idea de solo mostrar los dientes sin beber sangre, no puedo cuestionar los que buscan sobrevivir. Tampoco el refugiarse en el plan de vida perfecto, aun cuando yo fuese parte de ese plan. Pero aun así sigue siendo salvaje, cruzando la mitad del mundo para poner en práctica mejor que cualquiera el eterno retorno. Esas acciones no las hacen los domesticados, los domesticados solo hacen turismo. Salvajes ambos, el agua sigue su ciclo, la sangre se queda.

sábado, 13 de septiembre de 2014

Esetegeo

El humo sobre la cabeza y el cemento bajo los pies. Olvidar el horizonte y levantar la vista para mirar un pedazo de cielo. Lo cotidiano de no conocer a nadie y sentir más miedo al olvido que a la muerte. La paradoja de la existencia en un mundo donde el presente no existe, todos estamos  por una fracción de segundo obsoletos. La ciudad, así de simple, el amor al basurero que considero mi hogar.

jueves, 11 de septiembre de 2014

El chileno promedio

El chileno llega a su casa a prender la TV y es como si leyera el  Corán o la Biblia. Se queja de los políticos, se queja de los encapuchados y se enoja por el fútbol. El chileno promedio siente deseos de comprar un celular nuevo y ahí encuentra morfina, la paz que tanto la pantalla le aconseja.

El chileno promedio no es persona, puede parecerlo pero no lo es. El chileno promedio es funcionario, usuario, cliente, paciente, presidario, estudiante, pensionado o simplemente un puesto en una fila, pero nunca es persona. El chileno promedio dejo de ser persona un 11 de septiembre de 1973, entre el miedo a las balas y la vida maravillosa de los gringos por televisión.

Ahora el chileno promedio anda por la vida llenando calles y metros. Tiene valores como la familia y el trabajo limpio. Pero cree tener valores que no posee, como la paz y la solidaridad. Nadie que crea en la paz anda tocando la bocina o subiendo al transporte público a codazos. Nadie que crean en la solidaridad espera las 48 horas amor para hacerlo. El chileno promedio no es pacifista, el chileno promedio es pasivo.

Al chileno promedio se lo cagan y no hace nada más que poner mala cara. Le suben el pan y pone mala cara. Le suben el pasaje y pone mala cara. Le suben los combustibles y pone mala cara. Le bajan los pantalones, le meten la verga hasta que le toque el cerebro y solo pone mala cara. El chileno promedio estúpidamente grita “paz”, en vez de “venganza”.

El chileno promedio solo sabe tener miedo e intentar no morir. Vivir parece peligroso en ocasiones, incluso hasta inmoral. El chileno promedio cree en el judío zombi o en el horóscopo. Rara vez cree en sí mismo.

El chileno promedio es solo una consecuencia de muchas circunstancias y casualidades. Desde el mismo Big-Bang, pasando por vivir en el culo del mundo (Santiago es el asterisco), llegando incluso a los matinales hablando siempre del último temblor. El chileno promedio es un malvado plan de la mercadotecnia universal.

El chileno promedio no sabe a quién odiar y suele terminar odiando a sus pares. Argumentos como el fútbol o el gusto de musical. El chileno promedio no sabe a quién odiar y mucho menos tener argumentos sólidos. El chileno promedio escucha una campana y babea.

viernes, 5 de septiembre de 2014

Me pongo las antiparras.



No basta estar en contra de la poesía de pequeño dios,
en contra la poesía de vaca sagrada y de toro furioso.
También hay que hacer frente a la poesía de científico loco,
porque nunca bajé del Olimpo y ni siquiera he estado ahí.

Entiendan que lo de uno no es insolencia.
Solo las consecuencias de escribir con la sangre de la nariz
y hacer un penoso intento de homenaje.
¡Que viva el 15 de Vicuña!
¡Abajo la cota mil!

Al final de cuentas,
con tanto homenaje se puede decir lo que quiera.
Incluso alguien puede salir querellado
por hacer homenajes inmerecidos.
Puedo ser querellado por los penosos intentos de homenaje,
por el plagio de las risas fingidas
o por ser un pequeño burgués traicionando sus valores.

Por lo tanto aquí hago el frente dedicando palabras
y riéndome de mi admiración me pongo las antiparras.
Me bajo de esta montaña rusa solo para volver a subir.
Que la verdad no quede sin ser dicha.


lunes, 1 de septiembre de 2014

A los que quieren salvar el mundo:

No basta con defender los bosques, también se tiene que matar personas. Piensen en todos los árboles que ocupa un solo humano y solo para limpiarse el culo. Los humanos no generan oxígeno, en verdad solo generan hijos y basura. Por lo cual les puedo entregar una lista con sugerencias con ideas: Un falso reality show, donde en verdad sea una cámara de gas; considerar el serial killer como deporte extremo; ayuden al suicida a saltar del puente, ya saben, “sí tus amigos no saltan del puente, no significa que tú no tengas que saltar”; convencer a los quinceañeras que aborten; jugar tiro al blanco en el congreso o en su modo suicida en una comisaria; convencer a las veinteañeras que aborten; cumple tu fantasía de Edipo y asesina a tu padre (no es necesario tener sexo con tu madre). Si eres muy mamón y el matar te asusta. Por lo menos exige que en vez de lapidas, plantemos árboles por cada muerto. 

Entiendan que salvar el mundo no está en hacer like o amar a los perros. Hay que esterilizarnos y odiar los perros de verde. Corta, sin más vueltas que mirarte al espejo y ver el problema. 

domingo, 31 de agosto de 2014

Un poco más fuerte

Ella se convierte en una extraña y yo me hago más fuerte. He querido matarla en ocasiones, pero termino llorando y haciéndome más fuerte. Ella simplemente parece otra persona, nada que ver con la mujer que despertaba desnuda en mis domingos. Ella no es la misma y no puedo reclamar por eso. Yo tampoco soy el mismo desde entonces, soy solo un poco más fuerte.

Les conté que quise matarla, pero hubiese sido una pérdida de tiempo. Ella se mató a sí misma y ahora simplemente es otra. No es la que caminaba por el parque hacia una cerveza, no es la que hacia callar mis chistes fomes a besos. Puede que sea su forma de ser más fuerte, siendo para mí una completa extraña.

Ella tan distinta y casi irreconocible. Tengo que mirar dos, tres e incluso mil veces para reconocerla. Es un poco triste todo esto y solo termino haciéndome más fuerte.

jueves, 21 de agosto de 2014

Una breve comedia romántica

Ella pudo ser perfecta, pero no le gustaban los gatos. Me hablaba de libros que no fueron las 50 sombras de Grey, crepúsculo o la biblia, pero no le gustaban los gatos.

Yo me la pasaba bien al lado de ella, se reía con mis chistes y mientras tanto podía mirar su escote. Por otro lado ella parecía estar divertida con mi compañía y no parecía asustarse con mi cinismo. Era elocuente en sus comentarios y graciosa en sus historias, no entiendo como no le pueden gustar los gatos.

Intente tocar el tema un par de veces y sus ojos me advirtieron lo difícil que se me ponía ligar si seguía con el tema. Así que no seguí insistiendo, el que no le gustara los gatos no era tragedia. Si lo estaba pasando bien y de verdad estaba muy pronto a poder pasarlo mejor, solo tenía que obviar los gatos.

 No me fue difícil olvidarme de los gatos, nada era difícil de olvidar besando su boca. Se acabaron los peros y los casi. Un beso y olvidar hacían todo perfecto. El encontrarnos, el conocernos, el compatibilizar, el gustarse y el besarnos.

Estoy seguro que estaba satisfecho, porque no tenía esa sensación de que algo no encajaba. Solo me limitaba a disfrutar ese momento, entregar mis sentidos solo cada segundo en su boca. Solo me permitía distraerme en pensar en los próximos besos y en recordar por siempre esa primera vez. Claro que estaba satisfecho y me sentía un bastardo con suerte.

Caminamos hasta el metro de la mano y solo quería pensar en una próxima vez con menos ropa. Tenía toda la confianza de que así sería, de nuevo estaba ahí creyendo en el destino. Solo tenía que lanzar la invitación de forma sutil y ver que respondía.

-Si no tienes planes para el próximo fin de semana, podemos juntarnos. De hecho te puedo invitar a comer y te cocino algo rico.
-Me parece y yo puedo llevar el postre. Pero por si acaso, ¿tú no tienes gatos? Es que parecen que te gustan.
-No tengo gatos por ahora. Pero si, me gustan los gatos.
-Pero son traicioneros.
-Los humanos lo son más y andas con uno de la mano.
-Bueno, es mi forma de pensar.
-Está bien, no me molesta tu forma de pensar.

En verdad no me molestaba su forma de pensar, de hecho todo lo contrario. Por otro lado si ella era feliz detestando gatos, era su problema. Después de todo, también me dedico a destetar muchas cosas. Lo molesto, puede que fuese ese argumento para odiar una especie. Era eso o yo el que buscaba los peros. Pero como se imaginan, esa comida nunca se hizo y ninguno de los dos mostró interés porque se hiciera.  A los gatos parece que también les dio lo mismo.

domingo, 10 de agosto de 2014

Trillado

Ese día estaba dispuesto para arrancarme la cabeza, tirarla al piso, mearla y patearla hacia el olvido. Pero en el peor de los casos, me conformaba con vomitar el hígado como plan “B”. Al final solo era un trillado, con un problema trillado y el consuelo trillado de trastocar los sentidos.

Entre perdidas de consciencia y otros orgullosos pecados me fui aceptando el panorama. Estaba triste, no lo niego. Pero entre la trillada nostalgia, pude liberar una trillada risa, con las trilladas groserías.


El ánimo subía un poco. Incluso con un despertar de un dolor de cabeza como si me la hubiese arrancado, tirado al piso, meado y pateado hacia el mediodía. Me atragante con paracetamoles y sobreviví de suerte, pero de buen humor extrañamente. Mis problemas sociales se resolvieron casi en su total, con los trillados vicios de hablar solo y correrse la paja. 

jueves, 24 de julio de 2014

El ángel de la perversión

Los voy a matar a todos. Los voy a desmembrar, destripar, quemar, desangrar, ahorcar, aplastar, mutilar, machacar, cortar, asfixiar, decapitar, disparar o apuñalar a todos. A esa embarazada por ejemplo, voy arrancarle el feto abriendo su abdomen hasta la altura del cuello. Después estrangularé con el cordón umbilical a la criatura y esperando que sea visto por su madre agonizante.  O al viejo de bastón, de forma sutil, voy a patear su apoyo haciéndolo caer en medio de la calle y que los automóviles lo revienten por todo el pavimento. Arrancar de mordiscos la cara de ese joven, a martillazos dar nueva forma la cabeza de esa señora. Todo eso lo voy hacer y con cada nueva víctima inventare formas nuevas de destruir sus cuerpos y vidas.

Voy a caminar entre los cadáveres pateando sus cráneos y al atardecer me pondré borracho mientras veo como se pudren. Sentiré el pegoteo de la sangre en cada paso victorioso, mientras el hedor a muerte me pone por encima de la ciudad devastada. Prenderé fuego a todo y buscare sobrevivientes para quemarlos vivos entre la podredumbre. Voy a matarlos a todos. YO VOY A MATARLOS A TODOS…

-¡Señor! Señor disculpe, es su turno.
-Ah, este… espere. Aquí le traje la copia de los documentos.
-Veamos, bien, todo en orden. Con este recibo puede retirarlos más tarde.
-Gracias, que tenga un buen día.
-Igualmente.

Voy a matarlos a todos. Voy a matarlos a todos. Voy a matarlos a todos. Voy a matarlos a todos. Voy a matarlos a todos. Voy a matarlos a todos. Voy a matarlos a todos. Voy a matarlos a todos.

miércoles, 28 de mayo de 2014

No es

Caminaba por cada pasillo y mi mente repetía: “La vida no es sagrada”. Miraba el gris de la gente y mi mente seguía: “La vida no es sagrada”. Vi culos, escotes y con libido mi mente repetía: “La vida no es sagrada”. Resistiendo el esfínter llegué al baño y mi mente gritaba: “LA VIDA NO ES SAGRADA”. Aborte un hermoso feto café en el baño de un centro comercial y la vida no es sagrada. 

miércoles, 5 de marzo de 2014

32 años de un paria

Dando pasos en falso
Fue como llegué a este día
Pero no lo suficientemente sabio
Aun sueño con ser un hijo de puta famoso

Pero me siento orgulloso del todo
La primera media hora de esta nueva vida
En complicidad de una flaca
Me he corrido la mejor paja de este mundo

Sigo con la cabeza dando vueltas
Y la lengua sin control
Ya me toco asumir
Puede que me toque este año capitalizar

(Eso sí se puede sacar dividendos del caos) 

martes, 25 de febrero de 2014

Esta ciudad

Ya ni sé cómo explicarte
Que en esta ciudad
Sobre este cemento
Con tanta gente anónima
Con tanta basura publicitaria
Solo quiero ir contigo de la mano

Resistiendo las vergüenzas
Bajo el escenario de los faroles
Las palomas más sucias
Y el miedo a payasos y ratones
De la mano haciendo frente
Y caminado con el otro al lado

No sé cómo decirlo
Que en esta ciudad
Con oasis de cerveza
Divida por un rio color mierda
Es tu mano
La que hacen mis pasos.

lunes, 24 de febrero de 2014

Guía practica paria para hacer letras tipo Arjona.

Les enseñaré cómo se hace una letra tipo Arjona, pongan atención y podrán hacerlo en sus casa e impresionar a sus amigos.

Primero escoger un tema relacionado con una mujer o con un tema relacionado con el amor, en fin, todo lo que pueda identificar a una mujer de 20 en adelante. Por ejemplo una mujer que es buena amante pero la cocina no se le da tan bien:

“En la mesa no tenía los aplausos
Que con maestría consigue en la alcoba,…”
(Fíjense en la sutileza para hacer referencia a ambas circunstancias usando metáforas. Las metáforas son simples, solo di una cosa pero usando otra cosa. Ej: caminar en el aire es volar, acto de humanidad en contra del mundo es hacer caca).

Vamos al siguiente paso. Ya tenemos a nuestra protagonista, necesita verse en problemas por algo en lo que es buena y en lo otro no. Es necesario que lo hagan rimando, aun cuando pueda sonar ridículo y todo en lo posible con más metáforas.

“… ella se esmera en satisfacer todos los apetitos
pero entre cucharadas solo se siente boba.
Intenta hacer entre el fuego y el vapor,
lo que consigue con caricias y sudor.
Pero con el delantal se siente perdida
Sabiendo que desnuda se está mejor.”

Ahora el paso más importante de todos, el coro. El coro es el núcleo de la letra y es importante una sola cosa, dar ánimos a esta mujer con su problema, que vea el lado positivo de las cosas. Que rime ridículo, usar metáforas sin asco e imaginar que tienes que hacer que un grupo de mujeres coreen la letra casi como si fuera un himno:

“Qué importa si quemas la ensalada
cuando tú eres todo fuego,
lo que te hace ser amada
es lo que preparas en la cama.
Si lo tuyo es hacer sentir escalofríos,
Seguirás siempre siendo dama,
seguirás siendo la mujer que ama
más con el fuego de sus besos,
tu boca es el horno de los deseos.”

Ahora puedes agregar otras estrofas, dando vuelta con metáforas el mismo problema un par de veces y listo, tu tema Arjona estará listo para ser amado o causar asco. (Si usas contradicciones queda más Arjona aun)

lunes, 17 de febrero de 2014

Incompleta

Los goles del eterno por la pantalla
Cerveza fría en mi boca
Y plantas mágicas en mi pipa
Aun así
Con la luna más redonda
La felicidad es incompleta.

domingo, 16 de febrero de 2014

Noche de hortensias

Intoxicado por las hortensias
Perdí la conciencia lentamente
Sin recordar que odiaba
Sin saber si estaba bien o mal
Ninguna noción de por qué las noches me llevan al caos
Apenas incluso recordaba mi propia existencia

No sé si culpar a la flores o a mi necesidad biológica
Que en alucinaciones me vi entre aplausos
Muestras de apoyo a mi comportamiento acido
Mientras una joven sin rostro entretenía mis brazos
Entre que arrancaba y volvía
Para besarla en donde pude imaginar que tuviese los labios

La mañana se mezcló con la realidad
Recordé incluso que tenía hambre
Tener que poner algo de orden en mi universo
Todo eso que hace querer mirar un poco más el techo
Y poder dejar las cosas para más tardes

Pero me mantenía confuso la joven sin rostro
Los besos que rayaban en el surrealismo
El vaivén de sus jugueteos
El que solo fuese una descocida nuevamente

La paradoja de saber quiénes son esas desconocidas
Al diablo con qué me intoxique las próximas noches
Sean plantas o algo dentro de una botella
Intoxicado con los brazos abiertos esperaré cada visita
Tan inconsciente
Como para olvidar la única mujer con cara.

jueves, 13 de febrero de 2014

Las cosas que no te importan

Se ha resuelto el misterio del whisky
Encontré el detergente perdido
La cerveza y yo causamos estragos
Otro teclado al cementerio
Censurado de nuevo en Facebook
Nunca pensé que fuera tan necesario la familia y los amigos
Nunca imagine lo necesario de sentirse querido

Conflictos internos me tienen en silencio
Tanto literato abstemio me explica tanta poesía mediocre
Todos coinciden que soy una bomba
El lobo habla conmigo todas las noches
Conocer gente nueva no es difícil
Lo difícil es tener que disimular que al rato me aburren
A veces me gusta beber al lado de la tumba de Nica
Me gusta beber para el placer de ser un podrido

Cada vez me preocupo menos de mi aspecto
Si a nadie le gusto gordo pues ya da lo mismo
Encontré una cola y me la fume creyendo en la fortuna
He visto tanto anime como para odiarme
Extraño mucho a todos mis muertos

A veces rio
A veces ando de buen humor
A veces un té es una buena compañía
A veces suelo portarme bien
A veces me duermo a una hora decente
A veces creo que todo es para mejor

Cada día leo más sobre ciencia
Y ya puedo explicar cosas sobre universo que antes no entendía
He leído muy poco de literatura
Casi nada de filosofía

No sé si decirte que tan bien puedo estar
Huelo mal casi todo el tiempo
Sin lavamanos
Encontrando sabor amargo en el triunfo
Pero es como quiero ser
Porque es como soy
No sé por qué digo todo esto
Solo es enumerarte las cosas que no te importan.  

miércoles, 12 de febrero de 2014

El lobo y la hada (o el cuento que nunca fue)

Fue en eso que el lobo acercó su hocico a los pies del hada
Y ella sin miedo dejo que la lengua de la bestia la recorriera 
Pocas cosas en el hocico de un lobo no significan muerte
Pero el hada solo era deseo
Un deseo que llegaba con todo hasta la entrepierna del hada
Con un apetito de libido más que estomago
Solo hacía que el hada deseara algo más que una lengua
Deseaba al lobo
Y lo deseaba tan salvaje como fuera posible

El hada le da la espalda al lobo
Es primera vez que algún ser vivo le da la espalda para no escapar
Se pone de rodillas
Extiende sus alas
Se inclina dejando ver bajo sus vestidos
Sus nalgas y su sexo ya salivado
El lobo
La mira
Siente deseos
Su pene rojo es lo único que se puede ver en medio de la oscuridad de los arboles
Como si el fuego mismo saliera por debajo de su abdomen
El hada espera
Llena de placer y miedo
Pero no puede aguantar más
Sentir al lobo dentro de sus carnes
Impensado que un ser mágico llegue a ese extremo con una bestia

El lobo se acerca
Abre sus fauces y muestra sus colmillos conocedores de muerte
Vuelve a lamer la entrepierna
El ano
Y las nalgas
Pero ya no aguanta
Su falo pide entrar entre tan nobles carnes
El hada mira hacia su feroz
El hada pide que sea suave
El lobo ya no aguanta
El deseo de la debilidad del hada no es señal de matar
Es unirse a ella
Unirse su calor

Su calor intenso se mezcla con la humedad
Una segunda envestida
Logra su objetivo
Entra con algo de dificultad al principio
Pero después puede hacerlo más fácil
Estaba completamente lubricada y suave para que cada envestida fuera con más furia
Más placer
Más salvaje
El hada sentía entre sus entrañas el calor del lobo
El fuego que la quemaba en cada rose
El fuego que estremecía hasta sus alas
Y su bella voz
Que cantaba de melancolía
Hacia nuevos sonidos de placer

Un quejido de placer
Que hasta los árboles se estremecían
Y la luna
Observando tan salvaje acto
Brillo con más fuerzas
Para que el pelaje del lobo brillara
Y los ojos del hada resplandecieran
Seguían las constantes penetraciones
El hada
Tiritaba
Se contornaba
Y no sentía el dolor de las garras de la bestia sobre su espalda

Sentía dolor si
Pero el placer mismo que la llenaba
En eso
Cuando el hada ya no más podía
Sintió como la cabeza del lobo latía
Y cada latido de su pene
Chorros tibios botaba
El lobo aullaba
Aullaba del placer mismo
No era necesario matar para sentir el placer de una piel tan suave.

martes, 11 de febrero de 2014

El adiós del hombre triste

No era especial
Nunca supe si era bueno en algo
Y poco parecía importarle
Solo era triste
Tan triste como canción de abuelo

Me gustaba sentarme cerca por si decía algo
Pero solo distraía su mirada por una fracción de segundos
Después se perdía en algo que solo el podía ver
Y el mundo parecía su desprecio

Solo movía los labios para hablar con su sombra
Y caminaba para no sentirse muerto
Un día camino hasta no volver
Y los tristes fuimos nosotros sin verlo de nuevo.

lunes, 10 de febrero de 2014

Las mujeres.

-¿Y cómo te gustan las mujeres?
-Me gustan reales
-No en serio ¿qué atributo deben tener?
-Qué mejor atributo que la realidad
-¿Cómo así?
-Te explico
Hubo una que llamó mi atención por un breve tiempo
Solo por definirse a sí misma como un desastre
Solo encuentros del tipo casual
Besos y sexo tan casuales como mi interés
Y ambos nos quedamos en silencio como despedida
Lo que llamó mi atención fue eso de “desastre”
Más bello y respetable que ser princesa
Todo eso la hacía tan real
Como acariciar vello púbico
-¿Después todas fueron un desastres?
-Todos somos un desastre en ocasiones
Pero nada más mata paciones
Que la hipocresía de querer ser perfectas.

jueves, 6 de febrero de 2014

A mi favor.

Puedo decir a mi favor
Que aun quiero reírme de algo ofensivo
Tan ofensivo que el mundo haga de lado su desprecio
Quiero liberar a los presos mentales
A los presos sexuales
Y todo quien se encuentre atado de manos

Que aun puedo sonreír solo porque si
Y que me sobran los motivos para llorar
Pero tan solo quiero estar sentado en medio de la noche
Soportar la ansiedad hasta la madrugada
Y con una mueca de burla ignorar alguna que otra lagrima

Que me gusta escuchar lo que me dicen los perros
Poner atención a las campanas que atrapan el viento
No perder registro de los ruidos de la cocina
Y entablar diálogos con en el silencio

Aun disfruto del té con azúcar
Y los disfruto aun sin un miedo a la diabetes
Como disfruto la soledad aunque me vea apretando los puños
Y sin ningún miedo a perder toda cordura

En mi favor
Hay mucho que se puede decir antes de que algo sea crucial
Aun cuando nada parece serlo
Por mucho que apele a la propia existencia
Nada tiene una pisca de querer serlo
¿Será porque todo lo digo desde el mismo suelo?
Nada parece ser crucial solo cerca del infierno

¿Y en mi contra no hay nada al respecto?
Aun la amo
Aun cuando ya es más que masoquista hacerlo
Intento odiar el mundo
Pero mi odio queda a medias
Como las excusas
Como los argumentos
Y solo junto ánimos para encontrar algo a mi favor
Algo que justifique la luz prendida
La música de la radio
El miedo abrir la ventana
Y el rencor de que ella
Solo sea un recuerdo. 

sábado, 1 de febrero de 2014

El tambor

Fue cuando sintió el agua escurriendo por su cabeza, que Darío pudo despertar de su estado inconsciente. Solo le tomó un par de segundos darse cuenta que algo malo estaba pasando, algo que sin entender lo tenía ahí inmóvil y que todo daba a entender que las cosas se pondrían peor. No solo por el agua o que estuviese inmóvil. También estaba el hecho que se encontraba desnudo, sentado estratégicamente con las rodillas llegando casi a su mentón, tener tanto los brazos como las piernas encadenadas entre si y por encontrase de esa manera dentro de un tambor de acero. Era lógico que pocas posibilidades de salir vivo no tenia, pero mientras el tambor se llenaba lentamente con el agua fría, no dejaba de pensar que clase muerte le estaban destinando. La idea de morir ahogado era la más recurrente, remotamente tuvo la rebuscada idea que el agua fuera mezclada con soda caustica. Pero fuera como fuera, estaba seguro que no solo querían matarlo, también le querían ver sufrir.

El agua seguía cayendo lentamente y estaba llegando algo más arriba de su ombligo. Intentó de ver por sobre el tambor y ver en qué lugar estaba, pero el agua nublaba su visión para tener una pista en concreto. También intento saber quién o quienes estaban detrás de esto, pero quien llenaba el tambor estaba a su espalda haciéndose imposible verlo de momento. Por alguna razón no estaba amordazado, por lo cual fue cosa de tiempo que gritara por ayuda, suplicar y hacer preguntas de por qué él pasaba por esto.

-Ayúdenme, por favor no me hagan nada. Tengo dinero, les puedo dar dinero. Por favor no me maten, yo no he hecho nada. ¿Qué me quieren hacer? Yo no tengo que ver con nada, por favor. ¿Qué es lo que quieren? Juro que les puedo pagar si me dejan ir.

Pero fue en vano, el agua seguía llenando el tambor y nadie parecía estar preocupado por sus suplicas o por responder sus preguntas. Lloro un poco algo resignado, sea quien sea el que estaba detrás de todo, ya había escogido su suerte de forma sádica. Intento hacer memoria de que fue lo último que recordaba, eso mientras el agua ya estaba a punto de llegar a su cuello. Su último recuerdo se limitaba a la fiesta electrónica del sábado, de cómo se estuvo preparando antes del evento. De la previa en su departamento con amigos, de cómo designaron a los conductores y todo el entusiasmo de lo que parecía una noche inolvidable. Pues ahora era una ironía en esos momentos no poder recordar casi nada de esa noche, en eso pensaba cuando se dio cuenta que el agua ya había cesado de caer.

Pudo ver un poco el techo de lugar y con horror vio pasar la silueta de su verdugo. Era casi de película el ver que usaba una capucha, como si fuera una especie de monje oscuro. Se le veía que ponía algo frente al tambor mientras parecía acomodarse en algo. Una fuerte luz salió de del objeto recién colocado, dejando en claro que era una lámpara. Encandilado intento ver el rostro de su captor, pero poco pudo ver. La luz que le daba en los ojos, el que este usara capucha y más el hecho que llevara lentes oscuros. Nada le daba una idea de quien pudiese ser y tener la última esperanza de lo que pudiese ser una broma pesada, aunque no conocía a nadie capaz de hacer una broma así. Intento hablar de nuevo, pero su captor le hizo la señal de silencio con el dedo sobre su boca. Entendió que era mejor obedecer por el momento, lo que fuera para retrasar su destino. En eso vio cómo su captor levantaba un objeto con su mano derecha, no sabía bien que podía ser en un principio, pero al sentir que apretaba una tecla pudo adivinar que era una grabadora. Lo que escucho en ese momento le heló la sangre por completo, no solo porque la voz que salía de la grabadora era ronca y de ultra tumba. El mayor de los miedos era escuchar con esa voz, que su destino tendría un final terrible y lleno de dolor.

<<Hola Darío, tú no sabes quién soy pero yo sí creo conocerte algo. Podrás disculpar que no me presente, pero quien soy no viene al caso por ahora. Te preguntaras ¿qué te voy hacer? Te voy hacer sufrir, te are sufrir de tal forma que desearas morir y claro, vas a morir. Pero tendrás según se dice la muerte más dolorosa, vas a morir hervido como si fueras una langosta. ¿Por qué te hago esto? Se podría decir que es una venganza, ¿venganza de qué? Pues tienes los siguientes 10 minutos o una hora de lo que te lleve morir en poder responderlo por tu cuenta. Puedes gritar lo que quieras, incluso pedir auxilio, pero cada grito de dolor para mi será la música más selecta. Por algo no te amordacé y nadie te va escuchar más que yo, de otra forma hubiese tapado tu asquerosa boca. Ahora si me disculpas, prenderé la cocinilla que he puesto bajo el tambor. >>

Mientras la silueta del captor desaparecía de su vista para prender el fuego, intentó hacer un poco más de memoria en general de su vida. ¿Qué clase de cosa habrá hecho para merecer muerte tan horrible? ¿A qué clase de maniaco pudo hacer enojar de tal manera para terminar así? No creía haber hecho algo tan malo en su vida, no para el tormento que estaba a punto de pasar. En eso estaba cuando sintió como el metal bajo sus nalga y pies, recibían el calor del fuego directo. Volvió a suplicar y pedir perdón, pero le fue en vano. La suerte estaba echada, no había nada más que hacer que intentar recordar y ver si de esa forma podía distraerse en algo del dolor y el miedo.

De niño molestó a un compañero del colegio, pero no era el único y tampoco el que llevaba la batuta. No podía ser eso o tendría a medio curso cocinando a fuego lento. Una vez discutió con un viejo por un puesto en una fila, se dijeron un par de garabatos, pero no más que eso. Imposible que el viejo tuviese tan buena memoria y de haberlo capturado tendría que ser en la fiesta electrónica. La fiesta electrónica era la clave, ahí estaba la respuesta. Era claro que el sádico que lo estaba mirando hervirse vivo, estuvo en la fiesta y que sabía de antes que el iría. Solo tenía que recordar la fiesta, qué fue lo que pasó y  de quienes sabían de que el iría. Pero el calor del metal cada vez lo distraía más, sin contar que el agua cada vez estaba llegando a una mayor temperatura.

Fue cosa de tiempo para que Darío diera los primeros gritos, el calor se hacía insoportable y el dolor en donde rosaba con el metal no lo dejaba pensar. Por otro lado el captor y su silencio le hacía sentir pánico mezclado con odio. Fue también cosa de tiempo en empezar insultarlo, al final de cuentas moriría igual. Fue ante los primeros insultos, que detrás de la luz enceguecedora, le pareció ver lo que era una sonrisa. Fue extraño verlo sonreír, porque lejos de ser una sonrisa malévola, más bien era una sonrisa amable. Mucho más impresionante aun, era una sonrisa que parecía haber visto en algún lado, sin ir más lejos en la misma fiesta. Recordó que en un momento fue a comprar un ron, estaba algo ya borracho, pero el sudor del baile lo mantenía en buen estado. Un ron más no sería problema y fue a la barra por uno. Pero cuando estaba con el vaso en la mano, alguien se le tropezó en el camino botando gran parte del contenido. En un momento sintió rabia con el tarado que se le atravesó, pero este de forma amable le sonrío, le ofreció disculpas y se comprometió en comprarle otro trago. Quedo conforme e incluso le pareció un tipo correcto y amable. Pero dejo de recordar en un momento porque el agua ya estaba llegando a su máximo punto de ebullición, ahora el dolor era generalizado desde la planta de sus pies hasta el mentón.

No podía pensar más que en el dolor y el ver como el agua hacia sus primeros gorgoritos no le ayudaban a pensar en otra cosa. También estaba el hecho de ver como su piel comenzaba a enrojecer rápidamente y en algunas zonas incluso a desprenderse. Era preferible ver hacia la luz y ver la cara del maldito sonriente, el mismo que compro el trago de compensación. Siempre estaban esas leyendas urbanas con la moraleja de no recibir tragos de alguien desconocido, pero nunca podría de sospechar de una sonrisa tan amable como esa.

-Estabas en la fiesta, tú tropezaste conmigo. ¡Contesta! ¡Dime quien eres desgraciado!

Pero no hubo más respuesta que una señal hacia arriba de su pulgar derecho, no emitió ningún sonido y seguía mirando a Darío hervir en agua. Mientras Darío se retorcía y exclamaba el dolor de ya sentir su piel desprenderse por completo, dejando las carnes vivas expuesta. Ante ese panorama era mejor seguir recordando y buscar distraerse un poco de como el agua hirviendo parecía penetrarle hasta los huesos. Ya sabía que era el tipo amable de la fiesta, de que fue obvio que algo puso en su trago y que el plan le salió de maravillas. ¿Cuál fue el motivo? Pues ya no podía pensar en una respuesta lógica, no cuando te das cuenta que parte de tu grasa comienza a derretirse y flotar junto con los pedazos de piel en el agua.

Morir, solo queda morir para poder terminar con todo el tormento, el horror y no tener que aguantar al sádico, silencioso y sonriente. Morir y todo terminaría de una vez. Que le pagaran un balazo, le abrieran el cuello o algo más rápido que estar cocinándose dentro de un tambor. Ya no sabe cuánto tiempo ha pasado desde que recuperó la consciencia, pero ha sido tan eterno todo, que ya solo quería que terminara. Que terminara el dolor, la humillación y la sonrisa del maldito que tenía en frente. Era tan desagradable como la misma tortura, esa sensación de que disfrutaba su dolor. Dolor por el cual ya estaba sintiendo incluso en sus entrañas y cada órgano interno. Pero esa sonrisa no solo era de la fiesta, por alguna razón recordó la foto del ex de una antigua conquista. En una fracción de segundos todos los cabos estaban atados y ya no había dudas. <<Tú eres el ex de…>>. Pero no pudo terminar la frase y mientras sentía que ya se quemaba por dentro. Dio su último respiro mirando la sonrisa de su verdugo, mientras este le hacía un gesto de despedida con la mano sin decir ni una palabra.




viernes, 31 de enero de 2014

El día de la balanza

Va llegar un día en que la balanza tenga la razón
Y tomar una decisión desesperada sea tan fácil
Tan increíblemente fácil como perder la cordura
El tiempo se va consumiendo a sorbos gigantes
Y poco margen queda para estar con dudas
Por mucho que las noches parezcan infinitas
Va llegar ese día

Entonces
Solo entonces y en ningún otro momento
La libertad dejará de ser un abstracto de consignas
La realidad mutará como el agua
Quedará expuesta la verdad de los sin sentidos
Saldrán a flote lo complejo de tener sentimientos
Y no habrá espacio para los remordimientos

Solo tener claro lo que se debe y no hacer
No llevar nada innecesario
Pero si guardar lo ganado con rabia
Lo ganado con hambre
Lo ganado con justicia
El resto es más que imprescindible
Solo va hacer estorbo y perjudicial
Y más que desecharlo hay que destruirlo

También tener en cuenta a quien avisarle
El mundo es una pérdida de tiempo repugnante
No malgastar saliva en algo que vive durmiendo
Solo aquellos trasnochado van hacer receptores
Ellos tienen que saber de ese día
De esa hora
Esa fracción de segundo donde no va existir un mañana
Solo un adelante con sabor a despedida.

Ni del alma, ni del pene.

¿No sé a qué me aferro?
A ver crecer el pasto
A la esperanza ingenua de vencer al capitalismo
O darle un sentido a una realidad te patea las bolas
Puede que solo sea dejar de ver la vida como un milagro
Y solo sigas respirando, consumiendo y cagando
Porque uno es macho, rudo y hediondo

Aunque lo de macho se reduzca aun libido desesperado
Lo rudo a querer destruir el mundo
Y lo hediondo solo es querer ser un poco más solitario
Ya no sé qué es verdad o mentira
Pero esa indiferencia me asusta
Es indiferencia con apariencia de locura total
Y con olor a muerte

Aun así me aferro a la vida odiando ser viejo
Tan hipócrita como vivir temiendo a la muerte
Tan estúpido como querer evitar las piedras del camino
Tan contradictorio como querer salir ileso
Y tan egoísta como terminar con algo en las manos

A lo que me aferro es tan infantil como transcendental
Y nula importancia por ser solo meditaciones de un vago
No sé si el mundo necesita de alguien que guste comer las cosas crudas
Y sentir placentero desprecio por lo humano.



jueves, 30 de enero de 2014

Lobo

Fue así como ella
En un acto de amor propio
Abrió la jaula del lobo
Deseando la mejor de las suertes

Pero el salvaje solo pudo ser libre
Cuando ella misma pidió que se largase
Que las calles sean su destino
Deseando la mejor de las suertes

Se le pudo ver después de un tiempo
Casi con la apariencia de un perro
Mantenía aun la mirada asesina
Pero eso no basta para que un lobo sobreviva
Solo tuve miedo porque ya sabía quién era
Por mucho que mantuviera el odio en sus ojos
Este lobo el hocico no abría
Era poco el miedo que se podía sentir
Tampoco me generaba lastima
Mucho menos risa
Parecía solo parte de la calle
Tan invisible como el cemento mismo
Me reconoció y se acercó para decirme algo
No se veía humillado
Solo con algo de orgullo herido
Solo me quedaba escucharlo
Y desear la mejor de las suertes:

“estoy en libertad de cometer cualquier asesinato
Pero solo termino escupiendo mi propia sangre
Mi rabia sigue intacta
Mi desprecio no ha cambiado
Pero aquí estoy
Aun sediento de muerte
Fantaseo con destripar como los viejos tiempos
Arrancar pedazos hasta sentirme satisfecho
Pero no encuentro ningún sentido a todo esto
A las muertes
A la destrucción para poder hacer camino
Solo busco en la basura una explicación
Algo que justifique tanto sin sentido”

Después de eso el lobo mantuvo el silencio
Y se puso a buscar algo entre los desperdicios
Solo pude mirarlo esperando que encontrara algo
Deseándolo con la mejor de las suertes. 


martes, 28 de enero de 2014

Esa maldita costumbre

Lo peor de esta historia
Es esa maldita costumbre
De forma tan animal
Me termine acostumbrando a ella

Me acostumbre a dormir desnudo
A buscarla medio dormido con el brazo
A no querer levantarme en este pedazo del mundo
Hacer un chiste por nuestros aspectos deplorables
Me acostumbre a no sentir vergüenza con ella

Era una costumbre verla deambular por el pasillo
Más de alguna vez con el culo al aire
Verla mear porque me excitaba
A tocarla
Me acostumbre a que fuera mía

De mala gana me acostumbre a sus mañas
Y ella también se acostumbró a mis manías
Estuve tres años comiendo ensalada con jugo de limón
Preparando un té más con dos cucharadas y medias de azúcar
Llevarla al hombro después de la ducha
No sin antes esperar el “calentito” perfecto
A discutir por trivialidades
A su orgullo doblegar mi atrevimiento
Me acostumbre a creer que volvería
Siempre volvía

Me acostumbre a panoramas rebuscados
Que muchas veces terminaban en algo improvisado
Por salir del paso
Alguna razón desconocida
O la mala suerte de nuestro lado
Me acostumbre a verla poco tolerante al sentirse frustrada
Me acostumbre a que su silencio fuera una señal nefasta
Me acostumbre a pesar de todo nunca soltar su mano
Me acostumbre a esa inseguridad de perderla
No pude nunca disimularlo bien del todo

Fue costumbre no beber sin comida
Ella un poco se acostumbró a verme borracho
Hacer competencias de flatos
A reírnos cómplices de nuestras groserías
Podíamos hacer un chisto de ello
O terminar follando en el sofá
Nos acostumbramos hacer humanos
Tuvimos la costumbre de también ser amigos
En lo posible no perder el contacto

Pero lo peor de todas las costumbres
Es que me costumbre amarla de forma presente
También eso de sentirme amado
De sentirla real
Pelusona
               Chúcara
                             Imperfecta
Y por más que lo intento no me acostumbro a la ausencia
Ni la suya
Ni la mía

Solo me acostumbro al imposible de olvidarla
A volver a masturbarme como un adolescente
A dar lastima entre botellas
A dar lastima en desvelo
Y dar rienda suelta a mi verdad decadente. 

sábado, 25 de enero de 2014

Fue durante una resaca

Fue durante una resaca
Después de dar lastima a la orillas de un rio
Después de intoxicarme con flores
Intentando llamar la atención en medio del abandono
Otro patético en despecho
De nuevo la ciudad como escenario de mis quejas y meados

Desperté con dolor de cabeza
En la comodidad de mi cama
Entre los olores de la cerveza
Los gases que me hacían sentir vivo
Y la sed era más importante en segundos que su desprecio

-Si sobrevivo una caña
Puedo sobrevivir un corazón hecho mierda-

Iluminado
Mientras cagaba cerveza
Podía ponerme de pie y seguir viviendo
Podía volver a terminar intoxicado
Sintiéndome como las reverendas al otro día
Pero nada me hacía sentir más vivo por el momento
Solo trastocar mi cerebro con algo
Y después mearlo, cagarlo, vomitarlo o solo asimilarlo

Pero el consuelo dura poco
Rascarme las bolas y rozarme el pico me hace recordarla
Pero el despecho me obligaba a no correrme la paja pensando en ella
Podía terminar llorando primero antes de eyacular mi mano
Dios no existe pero si la pornografía
Veamos que hay en el ciberespacio

Nada nuevo
Actores porno depilados e irreales
Japonesas de vaginas con pixeles
Y el dolor de cabeza me pedía un poco más de sueño

-Veamos algo en la tele que de sueño-

Fue cuando vi noticias
Cuando entendí que mi dolor no es nada
El mundo se desangra
Niños mutilados
Gente envenenada
Muertes que hacen ver que no existe la dignidad humana
Y yo sintiéndome mal por un corazón roto
Sintiendo dolor por una resaca
No era nada
Siempre va ser nada

Pero enfermo quise ver horrores
Decapitados
Un ser humano agonizante partido en dos
Soldados jugando futbol con una cabeza
México y sus carteles
Israel bombardeando Gaza
Me quejo de lleno
Aun puedo seguir drogado o borracho
Seguir siendo intoxicado con la impunidad de mi lado

No soy feliz
Sin ella no lo soy
Pero aun nadie me apunta con un arma
Puedo dormir tranquilo una vez más
Y tener otra muerte natural
Siendo humano es natural que mueras.